martes, 22 de junio de 2021

¿DONDE ESTA SAN TELMO?

 


El fuego de San Telmo o “Santelmo” es un meteoro consistente en una descarga de efecto corona electroluminiscente provocada por la ionización del aire dentro del fuerte campo eléctrico que originan las tormentas eléctricas. Estaba considerado un buen augurio por los marineros españoles durante la conquista de América. También es el nombre de un buque de guerra que zarpó del puerto de Cádiz.

Después del desastre de la Batalla de Trafalgar, con la flota española destruida y debiendo más de 30  mensualidades a los marineros, los movimientos secesionistas en las colonias españolas en América, etc.; Fernando VII intenta llegar a un acuerdo con el Zar Alejandro de Rusia al objeto de formar lo que se denominó como División del Sur.

Gracias a esas gestiones se reúne en el puerto de Cádiz una flota compuesta por los buques “Alejandro”, “San Telmo”, “Primorosa Mariana” y “Prueba”. Su objetivo era zarpar hacia América y someter a las colonias españolas, principalmente la de Perú.

Mal equipada y con averías la flota zarpa de Cádiz el 11 de mayo de 1819 al mando del Brigadier Rosendo Porlier. En un lugar conocido por los ingleses como “la latitud de los caballos” el buque “Alejandro” comienza a hacer aguas, acabando hundiéndose. 

Los otros tres buques continúan juntos hacia el Paso de Drake donde se separan por causas meteorológicas.  La Prueba” llega al puerto del Callao el 2 de octubre de ese mismo año y siete días después lo hace “La Primorosa Mariana”; informando a su llegada que a 62º Sur y 70ª Oeste pierde de vista al San Termo. Nunca más se supo de él.

Se informa de inmediato a España y el 6 de mayo de 1822 se da definitivamente por perdido el buque. Existen teorías que afirman que pudo haber supervivientes que durante algún tiempo pudieron vivir gracias a la carne de foca. La única verdad es que se ignora donde se hundió, el número de fallecidos, etc.

El caso es que el “San Telmo” forma ya parte de las muchas leyendas de Cádiz relacionadas con el mar, algunas de ellas expuestas aquí. Espero a lo largo de los próximos meses seguir con estas historias, algunas de las cuales forman parte del flokore de la ciudad.

La ilustración que se muestra con esta entrada indica el lugar donde fue oficialmente visto por última vez este buque.

En el año 2019 el Museo Naval de San Fernando (Cádiz) expuso una serie de maquetas y documentación de esta expedición, bajo la denominación genérica de La División del Sur.

La víspera de la partida el brigadier que mandaba la expedición, que había nacido en Chile, efectuó unas declaraciones al Diario de Cádiz. En la entrevista este señor se despidió del periodista diciéndole que se volverían a ver en el infierno. ¿Presagio de lo que ocurrió?

 

 

 

 

 


lunes, 21 de junio de 2021

LA LEYENDA DEL CANDADO

 


La moda o costumbre de dejar en las barandillas de un puente un candado, aunque parezca que no, es algo muy reciente. Surge en Italia y Francia y en muy poco tiempo recorre toda Europa. 

El culpable de este verdadero quebradero de cabeza de los servicios de mantenimiento de tantas ciudades europeas es Federico Moccia, que en el año 2006 escribe la novela “Tengo ganas de ti”.

En ella un joven intenta convencer a su amada del amor que siente por ella con una leyenda. Existe un puente, de nombre “Milvio”, que está en Roma y cruza el río Tibes. En ese puente para demostrar los sentimientos al ser querido hay que colocar una cadena en el tercer farol del lado norte de ese puente, unir ambos extremos con un candado y tirar la llave a las aguas del Tibes. Significando esta acción que el amor es verdadero y eterno.

Al poco tiempo comenzaron a aparecer en las barandillas de los puentes italianos candados, después en Francia y en cuestión de días en el resto de Europa.

Esta costumbre, que ya es leyenda, ha sufrido cambios llegándose a afirmar que es de origen ruso y su significado es totalmente distinto al aquí expuesto.

Es responsabilidad nuestra el mantener la llama del amor  encendida para que dure la eternidad de que se habla en la novela.

La leyenda ha llegado hasta aquí y, aproximadamente una vez al año, los operarios del ayuntamiento de la localidad donde vivo retiran los candados existentes en las barandillas de los puentes que cruzan el río Iro.

Hoy ilustraré esta entrada con una fotografía mía tomada esta mañana a uno de los candados existentes en el Puente Chico de Chiclana de la Frontera. Quizás en otro momento os vuelva a hablar de alguna otra costumbre o leyenda de esta localidad.